ESTA FERIA PIDE BAILE

En la fría jornada dominguera,en plena feria, la musica arrancó a sonar.
Los sones de «El nombrecito», de El niño y la verdad se adueñó de la esquina.
Y tras ella, una joven pareja comenzó a bailar.
La sucesión de pasos era acompañada por la mirada de los vecinos que transitaban por la callejuela, entre los puestos, buscando artículos y precios.
-“Salimos un poquito a disfrutar el sol y pusimos un par de salsitas.
Nos pusimos a bailar para darle un toquecito diferente a la feria de este domingo”, señala Facundo Olivera en una pausa entre canción y canción.
-“Nosotros hace ya tiempo que estamos aprendiendo en el MEM con el profesor Manuel Ribera y siempre nos juntamos a bailar», dice María Jesús Pittaluga Da Silva.
-«Es lo que nos gusta es lo que es lo que nos hace feliz, entonces dijimos por qué no compartirlo con los vecinos .
La feria pasada estaba sin música entonces decidimos venir…la gente de re buena onda…» añade.
-«Pasamos un lindo rato, cuando bailo siento una felicidad enorme, me siento libre,comparto con ella , es un disfrute y también te libera un poco…», agrega Facundo.
La música comenzó de nuevo, la gorra en la vereda espera, muda, el paso del ritmo y el compás.
Arte callejero, en la feria de los domingos, que cada día gusta más.